El desarrollo y crecimiento de cada bebé es diferente, pero las etapas de aprendizaje son comunes para todos y los niños ya nacen naturalmente preparados para ellas.

Desde que nace y hasta el tercer mes , el bebé se irá adaptando a su entorno familiar y empezará a desarrollar sus primeros hábitos: horarios de sueño, el horario de las comidas, del baño, etc.

Es importante durante éste período estimular al bebé con palabras y contacto visual frecuente, especialmente los padres y hermanitos. En ocasiones se logra con ello acelerar el aprendizaje del bebé y transmitirle sensaciones y emociones.

Los bebés están listos para responder a las estimulaciones tempranas, las caricias suaves son ideales para crear vínculos emocionales con el niño.

El bebá creará su propio campo expresivo a través de llantos, gestos, risa y balbuceos y de esta manera los adultos cercanos sabrán cuales son sus necesidades una vez que aprendan a reconocer esas expresiones del niño. No hay que olvidar que su primer lenguaje es el llanto, con él manifestará hambre, susto, dolor, fastidio.

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